Una interesante película que planteaba ya en 1948 las posiciones de una comunidad ante la diferencia de uno de sus miembros. Es ahí, en la negación de la diversidad, donde reside la causa de muchos otros problemas como son el bullying, el racismo, la homofobia o el fundamentalismo...
Uno de los aciertos de "El muchacho de los cabellos verdes" es sin duda centrar la diferencia en algo tan hipotético y remoto como es un cambio repentino del color del pelo, pues la trama no se cierra a un tipo de rechazo (a causa de la raza o de la religión), sino que queda abierto a analizar la actitud de una sociedad que siente miedo ante lo diferente, sea cual sea la causa que lo genere.
Por otro lado Peter, su protagonista, no tiene un problema puntual, como podría ser con sus compañeros de colegio, sino que es toda la comunidad, incluidas sus personas de máxima confianza, quienes muestran el rechazo hacia él.